La evaluación es un proceso de investigación, en el aula donde participamos todos; esto contribuye al fortalecimiento, y optimiza los resultados en el proceso de enseñanza – aprendizaje. El proceso de enseñanza a través de proyectos, en lo que respecta a las estrategias metodológicas los tipos de de evaluación, los procedimientos, técnicas e instrumentos que nos permite recolectar información sobre el aprendizaje de los niños, niñas y adolescentes en los diferentes tipos de contenidos, así como también los criterios e indicadores que determinen el tipo de aprendizaje, que los niños, niñas y adolescentes debe alcanzar y que están previstos en los programas y los proyectos que se desarrollan. Por lo antes mencionado la practica pedagógica no podrá darse separada de la practica evaluativa, se propiciara en el aula ambientes favorables, así cada sujeto avanzara a su propio ritmo de aprendizaje y progresara de acuerdo a sus niveles de maduración. El aula pasa a constituirse en un espacio de reflexión donde los niños, niñas y adolescentes representan el elementa clave para la participación y asistencia en las dificultades individuales sugeridas, garantizar el trabajo armonioso, en la búsqueda permanente de saberes para aclarar dudas y dejar espacios para que los mismos continúen indagando y construyendo conocimientos.